LA LUZ SOLAR Y EL ESTADO DE ÁNIMO

El sol, una de las estrellas más grandes, que hace parte de nuestro diario vivir y nos hace sentir una sensación agradable al contacto con nuestra piel, además de brindarnos vitamina D, tiene un efecto en nuestro estado de ánimo; por eso cuando los días son fríos y el cielo está oscuro, nos sentimos de una forma diferente, podemos experimentar tristeza, soledad y estar desanimados.

En países donde se presentan las estaciones, más que todo invierno y otoño, se reducen las horas de luz solar que puede provocar que las personas presenten depresión o trastorno afectivo estacional que como su nombre lo dice, se presenta en las estaciones que sobre todo son más frías en el año; por el contrario, en el verano y primavera, donde el sol está presente, se libera una hormona llamada serotonina la cual es la responsable de hacernos sentir felices.

En la depresión estacional se presenta, tristeza, aumento o disminución del apetito y sueño, menor energía y capacidad de concentración, perdida de interés en el trabajo y actividades que antes eran placenteras para la persona, movimientos lentos, aislamiento social, e irritabilidad, adicionalmente se ha visto en estudios que se presenta mas en mujeres que en hombres.

Cuando sentimos calor presentamos buen humor y con estado de ánimo más alegre, por lo tanto, las relaciones sociales se facilitan, estamos más sonrientes y con mucha energía. Por lo contratio, los climas más húmedos o fríos generan dificultad en la concentración, aumentan los deseos de comer y se presenta fatiga, también se ven efectos sobre el estrés que pueden afectar varias áreas de nuestra vida.